Se realizó un seminario sobre células madre

El encuentro apuntó a resolver el vacío legal existente en Argentina y gran parte del mundo acerca del patentamiento y los requisitos a seguir para la investigación con células madre. Se desarrolló en el auditorio FLENI y contó con expertos nacionales e internacionales.

“No podemos quedarnos con una legislación vetusta para responder a los problemas éticos que se presentan en la investigación científica. Es necesario crear algunas normas básicas, pero hay que tener mucho cuidado al hacerlo”.

El doctor Salvador Bergel, titular de la cátedra UNESCO de Bioética de la UBA, planteó así la problemática tratada en el V Seminario Internacional “Hacia la construcción de un marco legal y regulatorio para la investigación con células madre en la República Argentina”, que se realizó en el auditorio Fleni, en la Ciudad de Buenos Aires.

El encuentro contó con la disertación de expertos nacionales e internacionales, como el Profesor Graeme Laurie, de la Universidad de Edimburgo; la doctora Lygia Pereira, directora del Laboratorio Nacional de Células Madres Embrionarias de la Universidad de Sao Paulo; y la doctora Fabiana Arzuaga, coordinadora de la Comisión Asesora en Terapias Celulares y Medicina Regenerativa del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación. En tanto, el cierre estuvo a cargo del ministro de dicha cartera, doctor Lino Barañao.

“Estamos trabajando en el campo de la bioética, y estamos colaborando con el INCUCAI en la elaboración de una norma técnica que indique en qué condiciones deben ser tratadas las células madre antes de ser implantadas en los seres humanos”, explicó Arzuaga a la Agencia CTyS.

Esta comisión conjunta comenzó a trabajar en la elaboración de la norma en noviembre del año pasado, basándose en la legislación existente en Estados Unidos y en el escueto marco legal argentino, que incluye la Ley de transplante Nº 24.193 y algunas resoluciones del Ministerio de Salud de la Nación.

Pero según la especialista, además de la norma que están elaborando, “hace falta una norma superior con alcance federal que unifique el tratamiento de la temática y que preserve los derechos de los sujetos de la investigación y ponga algún límite al derecho a la libertad de investigación. Porque en definitiva, la prioridad en todo proyecto de investigación es el bienestar del sujeto, y luego la generación de un nuevo conocimiento”.

Por su parte, Bergel coincidió en este aspecto durante su exposición. “Creo que es importante dictar normas de orden superior. Acá se comprometen derechos personalísimos, y todo lo que tiene que ver con derechos personalísimos es de orden nacional”, explicó, al tiempo que consideró necesario que haya “foros de discusión en todo el país, porque estos son problemas que no atañen solamente a la comunidad científica sino que nos importan a todos los individuos como ciudadanos”.

Para finalizar, Arzuaga contó a CTyS los próximos pasos en la elaboración de la norma técnica. “Ya tenemos el primer borrador de lo que sería un proyecto de ley de investigación biomédica con células madre. Estimamos que en treinta, máximo sesenta días, podremos ofrecerlo al Congreso de la Nación para su tratamiento”, aseguró.