Una herramienta para medir el estrés en los trabajadores

Investigadores de la Universidad Nacional de Rafaela y de la Universidad Nacional de Rosario trabajaron en la adaptación y validación de un cuestionario de rápida y fácil aplicación que permite evaluar factores de riesgo psicosocial asociados al estrés laboral.

Magalí de Diego (Agencia CTyS-UNLaM) - Según la Organización Mundial de la Salud, se considera que “el estrés laboral afecta negativamente a la salud psicológica y física de los trabajadores y también a la eficacia de las entidades para las que trabajan”. Para reducir este malestar, muchas instituciones buscan detectar los problemas que aumentan el nivel de estrés de sus empleados. Sin embargo, la mayoría de las herramientas de diagnóstico del estrés implican métodos muy subjetivos.

“El estrés laboral está determinado por la organización, el diseño y las relaciones del trabajo, y tiene lugar cuando las exigencias no se corresponden o exceden las capacidades o los recursos del trabajador, o bien cuando el conocimiento y las habilidades de un empleado no coinciden con las expectativas de la cultura organizativa de una empresa”, señaló a la Agencia CTyS-UNLaM el doctor Juan Diego Vaamonde, investigador de la Universidad Nacional de Rafaela (UNRaf) y de la Universidad Nacional de Rosario (UNR).

Junto a su equipo de investigación, Vaamonde analizó, adaptó y validó un cuestionario autodescriptivo que fue desarrollado hace algunos años por el Ejecutivo de Salud y Seguridad del Reino Unido. Se trata de un instrumento integrado por 35 ítems que permiten cuantificar el estrés laboral de los trabajadores. Si bien el cuestionario original había sido aplicado en países como Italia, Irlanda e Irán, hasta la fecha no se registraban validaciones en países latinoamericanos.

A partir de la adaptación y traducción del instrumento, el equipo de investigación estableció las equivalencias semánticas y operacionales entre la versión argentina y la original, ya que la idiosincrasia y los contextos laborales y organizacionales varían según la cultura y el país. Luego, bajo la continua dirección de Vaamonde, la Universidad Nacional de Rafaela realizó la validación de esta adaptación.

Con tal propósito, se llevó adelante una investigación cuantitativa, empírica y no experimental, cuya muestra estuvo integrada por 532 trabajadores de diferentes organizaciones de Rafaela, Rosario y cercanías. El promedio de edad fue de 34.6 años y el de antigüedad laboral de 7.8 años.

El análisis estadístico de los datos obtenidos posibilitó validar la inclusión de seis dimensiones para conformar el cuestionario: control sobre el trabajo; apoyo de pares; demandas laborales; apoyo del jefe o superior; relaciones interpersonales negativas y claridad de rol, siendo las últimas cuatro las de mayor peso para evaluar el estrés laboral.

“Tomados en conjunto, los hallazgos muestran que la versión adaptada al español presenta satisfactorias propiedades psicométricas que convalidaban su empleo en el contexto organizacional argentino. La puesta en marcha de esta herramienta podría utilizarse para obtener información valiosa para planificar y ejecutar acciones de prevención e intervención del estrés laboral, permitiendo, por un lado, reducir las tasas de ausencias y de enfermedades, así como los consecuentes gastos en salud y, por otro lado, potenciar la productividad y el rendimiento en las organizaciones”, destacó Vaamonde.

Los resultados del estudio

Los investigadores indican que, a nivel general, los resultados obtenidos sugieren que quienes estarían en mayor riesgo de padecer estrés laboral serían, primeramente, “las mujeres, los trabajadores con poca antigüedad laboral y los trabajadores públicos, por su menor percepción de control sobre el trabajo”.

“Además, se observa que los trabajadores con formación universitaria, los monotributistas y los jefes, gerentes o supervisores también están considerablemente afectados, ya que vivencian mayores demandas y sobrecarga laboral; y, a los trabajadores con formación universitaria, también se les suma estrés por tener en muchos casos menor claridad sobre su rol”, agregó el experto.

Al analizar estos datos con mayor profundidad, los especialistas aseguraron que, además, “los hallazgos del estudio revelan la importancia de desarrollar estrategias destinadas a propiciar las percepciones de justicia en las organizaciones, hecho que redundaría en menores niveles de estrés y mayores montos de satisfacción laboral”.

“Al comparar a los trabajadores según la región - destacó Vaamonde -, se observa que los empleados de organizaciones radicadas en Rosario y su zona de influencia presentan montos significativamente mayores de estrés laboral. Específicamente, los trabajadores encuestados de Rosario perciben mayores demandas y menor apoyo de pares que aquellos que trabajan en Rafaela y su zona de influencia”.

“Los resultados de esta investigación podrían capitalizarse tanto para futuras investigaciones en el área como para el diseño y la puesta en marcha de políticas organizacionales tendientes a disminuir el estrés laboral y a promocionar la salud y el bienestar entre los trabajadores, hecho que tendrá un impacto colateral en su rendimiento laboral”, concluyó Vaamonde.