¡Es un pájaro, es un avión… no, es un Dron!

Planea como lo haría un ave que se desliza por la orilla de un río para obtener a su presa preferida, pero, en lugar de tener sangre caliente, cuenta con sensores y una electrónica de avanzada. ¿Qué es CUAR y cómo funciona el Dron no tripulado que crearon los alumnos del Departamento de Ingeniería?

Guillermo Meliseo (Agencia CTyS) - A simple vista parece una llave de auto tipo cruz, pero con cuatro hélices en sus puntas. Sin embargo, cuando se encienden sus motores, se eleva por el cielo el sueño realizado del los alumnos de la cátedra de Ingeniería en Informática de la Universidad Nacional de la Matanza.
 
Es que, justamente, CUAR (Cuadricóptero Argentino) es un dron no tripulado que se puede monitorear a través de una aplicación Android diseñada exclusivamente para tal finalidad.  En diálogo con la Agencia CTyS, Patricio Lo Duca integrante del equipo CUAR, comentó cómo surgió la propuesta del proyecto.

“La idea surge en el marco de proyecto de fin de carrera. Allí le presentamos a los docentes cinco ideas y la que prosperó fue la propuesta del dron”, contó Lo Duca, tras agregar que para su diseño, seleccionaron los componentes electrónicos, la parte de los sistemas y la aplicación en Android para controlarlo desde el celular.
 
El dron es un vehículo aéreo no tripulado que está generando una gran revolución en el ámbito del transporte aéreo. A pesar de no contar con un marco legal definido, muchos organismos, empresas y universidades apuestan por esta nueva tecnología.
 
De esta manera, los drones  podrían utilizarse para observar grietas en paredes de represas (donde el desplazamiento del hombre resulta peligroso), ayudar en un siniestro cuando las ambulancias no cuentan con un fácil acceso o delimitar caminos posibles frente a un incendio de grandes magnitudes, entre otros trabajos.

La aeronave CUAR se pilotea a través de un celular con sistema operativo Android como si fuese un control remoto. El equipo está preparado para sacar fotos y generar videos. Además, se le puede agregar coordenadas tipo GPS  para que el aparato se dirija a un lugar determinado. También cuenta con un sistema de descenso lento que permite que, ante cualquier pérdida de señal o baja batería, no se desplome e impacte contra el suelo.
 
“Su estructura es de plástico de alto impacto, tiene cuatro motores, cuatro hélices y cada motor tiene un control de velocidad determinado. Adentro, tiene una placa que controla todo los motores, su estabilización y un módulo que se comunica vía Wi-Fi con el sistema y con la aplicación Android”, detalló Federico Jordán, miembro del proyecto.

Pablo Pomar, uno de los docentes que trabajó con los alumnos en el diseño del dron, destaca la innovación pero hace algunas advertencias sobre su uso: “Es una tecnología muy interesante, pero si no se utilizada de forma debida, puede resultar molesto.Por ejemplo, puede generar interferencia en aeropuertos o se pueden producir casos de  violación de privacidad al estar elevado  muchos metros de altura”.

Victoria asegurada

La aeronave de los alumnos obtuvo el primer premio en el Congreso Nacional de Ingeniería Informática/Ingeniería de Sistemas (CoNaIISI), donde presentaron su desarrollo ante 48 universidades del país. “Fue la primera vez que participamos en un congreso nacional vinculado con lo que nosotros hacemos”, sostuvo Roberto Eribe, jefe de la cátedra. “Sin embargo, ya hemos participado en otros concursos, como los de Microsoft y la Expo Proyecto que se realiza todos los años”.
 
En ese sentido, concluyó: “La idea del año que viene es mandar cuatro proyectos a San Luis, porque a través del congreso nos dimos cuenta que tenemos mucho potencial para exponer, desarrollar y presentar trabajos de calidad, y a nosotros como docentes nos enorgullece”.