Inició el Congreso de Neurociencias, en modalidad virtual

Organizado por la Sociedad Argentina de investigación en Neurociencias y con la presencia de investigadores de CONICET y de varias universidades públicas, la edición de este año permitió más participantes y la inclusión de más temáticas por su modalidad remota.

Nicolás Camargo Lescano (Agencia CTyS-UNLaM)- La pandemia obligó a repensar y a reorganizar dinámicas de trabajo, y la ciencia y la tecnología no fueron la excepción. Para la realización de congresos y encuentros científicos, la virtualidad supuso toda una serie desafíos, ventajas y dinámicas distintas al formato presencial.

Este miércoles, comenzó el XXV Congreso de Neurociencias de forma totalmente virtual, organizado por la Sociedad Argentina de investigación en Neurociencias (SAN) y con más de 150 charlas y alrededor de 700 inscriptos, cifras altas si se las compara con los clásicos encuentros presenciales.

“Fue difícil tomar la decisión de realizarlo de forma virtual. En el proceso, hemos aprendido muchísimo y la participación de los jóvenes en la comisión organizadora, para apropiarnos de herramientas virtuales, fue crucial”, destacó, en diálogo con la Agencia CTyS-UNLaM, Liliana Cancela, investigadora del CONICET y presidenta de la Comisión Directiva de la SAN.

El Congreso, que se extenderá hasta el viernes, contará con 14 simposios, 22 charlas de jóvenes investigadores, 46 comunicaciones orales y casi 300 pósters –un resumen de la línea de investigación, para ser compartido ante pares-. “El hecho de no contar con restricción de espacios nos permitió poder incluir muchas más actividades y contar con más participación de científicos y científicas”, comentó la becaria Azul Silva, con sede de trabajo en el Instituto de Fisiología y Biofísica Bernardo Houssay.

Santiago Ojea, también becario del CONICET, apuntó a su vez que esta modalidad “favoreció la inclusión de temáticas muy diversas, dentro del campo de las neurociencias, y que repercutió en la cantidad de participantes”. Tanto Silva como Ojea participaron en la organización del Congreso en calidad de doctorandos.

El congreso ofrece disertaciones sobre inteligencia artificial, memoria, neurobiología, enfermedades neurodegenerativas,  cronobiología,  neuroquímica, neurofarmacología y neuroinmunología, entre otras temáticas vinculadas a las neurociencias.

“Los desafíos fueron el aprendizaje y el adaptarnos a cuestiones virtuales como, por ejemplo, elaborar códigos y protocolos de seguridad para disminuir las vulnerabilidades del sistema y organizar la disponibilidad y logística para ver cuántas salas paralelas podíamos mantener”, detalló Cancela, doctora en Ciencias Químicas.

Como contrapartida, la investigadora señaló la posibilidad de contar no sólo con más investigadores locales, sino con argentinos radicados en el exterior o científicos del extranjero. “Siempre participan y en los congresos suele haber disertantes de otros países, pero en esta ocasión se facilitó mucho más su presencia porque no había una necesidad de tiempo o presupuestos para viajes y estadías”, ejemplificó la investigadora.

Claves en un ámbito virtual

Nara Muraro, investigadora del IBioBA CONICET-Max Planck y una de las disertantes en el Congreso, valoró que “la virtualidad permitió la presencia de muchísimos expositores internacionales. Se da esta doble condición de que estamos tan lejos y al mismo tiempo tan cerca y, en ese aspecto, terminó jugando a favor”. Su grupo de trabajo estudia los circuitos y mecanismos que subyacen al sueño.

Para Muraro, además, la realización del Congreso es un hecho positivo en sí mismo. “Al ser un año de pandemia y de no poder ir a trabajar al laboratorio, tener la posibilidad de hablar de tu trabajo, de preparar tu póster científico y de interactuar con colegas es importantísimo, tanto por la experiencia como también para sumar al currículum”, señaló la investigadora. Por el IBioBA CONICET-Max Planck participaron, además del grupo de trabajo de Muraro, los grupos de Damián Refojo y de Antonia Marin-Burgin.

Eliana Mailén Fernández, becaria doctoral del Instituto de Investigaciones Biotecnológicas de la UNSAM, resaltó por su parte la inclusión de temáticas que vayan más allá de las neurociencias.

“Mi experiencia es totalmente positiva, los organizadores hicieron un gran trabajo para lograr la mejor experiencia posible. Celebro que se hayan agregado charlas de género y de discusión actual de Ciencia y Tecnología, son temáticas necesarias y muy enriquecedoras”, valoró la científica, cuya línea de trabajo investiga los mecanismos por los que el estrés crónico desencadena enfermedades neuropsiquiátricas, como la depresión.

“Si bien se extraña todo lo lindo de ir a un congreso de forma presencial, esta forma remota me viene sorprendiendo para bien, por la enorme diversidad de charlas, temáticas y expositores”, ponderó Julieta Laurino, becaria doctoral en el Instituto de Fisiología, Biología Molecular y Neurociencias (IFIByNE – UBA – CONICET).

“Incluso, a pesar de la virtualidad, se pudo recrear esa instancia más social e informal donde se debaten distintas cuestiones relacionadas a la vida académica y científica, por lo que la experiencia es muy positiva”, agregó la investigadora, que tiene como objeto de estudio los cambios cognitivos y cerebrales que posibilitan la incorporación y el procesamiento de palabras nuevas en adultos.

Para más información sobre el congreso se puede ingresar al siguiente link: https://san2020.saneurociencias.org.ar/.